El edificio se justifica como proyecto social y funcional, que integra los aspectos esenciales de sensibilidad medioambiental y el ahorro energético. Desde su localización singular en un entorno necesitado de iconos de referencia, el edificio se materializa formalmente en una pieza diferente, reconocible y a su vez, integrada en el espacio en que se encuadra. La forma de fachada y cubierta y las proporciones inusuales de los huecos inciden en su carácter formal como nuevo hito urbano.
El paisaje de la parcela lo constituyen, filtrados por el arbolado,
el
ferrocarril y los edificios industriales. El proyecto se concibe como
pieza de transición entre la edificación residencial, la
industrial y la vegetación. Su volumetría, con altura
variable y percepción siempre cambiante, se convierte en un
rasgo reconocible y de referencia del barrio. El
volumen del edificio tiene su altura mayor en el norte, área de
acceso desde la ciudad, descendiendo hacia el sur para encontrarse con
la futura zona verde y
las vistas del ferrocarril al fondo.
Conjugando zonas para el ocio y el esparcimiento, con espacios para la
realización de diferentes actividades culturales y recreativas,
y pensado desde el usuario, el nuevo Centro de Mayores cubre las
necesidades de un
segmento muy importante de nuestra población, que demanda
espacios modernos, adaptados a nuevas personas.
El elemento más característico del Centro de Mayores
será la cubierta, que con su perfil variable y pendiente hacia
el patio, se percibirá de manera diversa desde el interior y el
exterior del edificio. Hacia el
interior, la cubierta dará a cada local una altura distinta,
haciendo que estos sean proporcionados a su uso y dimensión en
planta.
Se ha optado por un edificio en dos plantas distribuido
principalmente
en planta baja, con un patio interior rodeado por un corredor
multifuncional desde el que se accederá a los distintos
espacios. Desde el acceso y a
través del corredor y del patio, el usuario tendrá una
visión completa del espacio, que se espera lo hará
más amable, tranquilizador y en la que
se multiplicarán las posibilidades de relación con el
resto de las personas. En planta, el corredor es continuo en el lado
del patio y escalonado en el de las
salas, formando remansos en los accesos a las salas y dotados de bancos
para la estancia y el descanso.
La fachada se concibe ligada al espacio exterior de la parcela. A la silueta variable definida por la cubierta se superpone una distribución vertical de huecos que abarcarán toda la altura de la fachada y que dialogarán con la vegetación.